LA MOSCA: CRONICA DE UN REGRESO ANUNCIADO, ESPERADO Y DESEADO

El día de hoy por fin apareció la revista de la Mosca en la pared, pero ahora transmutada como: Mosca. 

Desde marzo fue anunciado por su Director Hugo García Michel de su retorno a los medios impresos y a lo largo de las siguientes semanas poco a poco se fue dando detalles del equipo que conforma ahora este proyecto que desde 1994 cambio el modo de hacer periodismo de rock para bien de quienes amamos al género y somos críticos de esta para discriminar lo mejor de lo peor que esta ofrece, totalmente lejos de esos “comunicadores y medios” de siempre que nos han querido atiborrar de artistas y bandas poser y pretenciosas como las perlas de la virgen.

Tempranito fui a mi puesto de revistas a buscar mi ejemplar Moscoso… ¡¡Puta madre!! Que no hay –No ya ni existe– decía la voceadora, bueno, fui a otro y ahí si estaba, solo fueron unos segundos de que la vi, la tome y le pague al voceador y como niño ansioso de comprar su dulce favorito casi corrí a mi casa a leerla con extrema paciencia como todo lector moscoso convertido que espero este día “M” (de mosca) para el momento de la verdad.

El olor de recién salido de la imprenta y tenerla en mis manos fue una sensación fascinante, bueno chingona, como los días que iba a comprarla como CCHero (y ahora como diseñador gráfico), le di una hojeada y a primera vista el diseño del contenido es casi igual a lo que ya nos tenía bien acostumbrados la mosca en propuesta gráfica, pero hay un evidente aire de cambio en parte del estilo para diferenciarse de su etapa de 1994 a 2008, pero la esencia de esa época estaba bien adherida con su nueva etapa que hoy comenzó.

Lo que estoy agradecido es que no se atrevieron a cambiar el formato del tamaño de la revista, que fue un parte aguas en su momento y que otras revistas disque de rock copiaron, pero nunca igualaron la calidad del contenido de la Mosca.

No diré al pie de la letra todo el contenido, para no joder a quienes aún no han comprado su ejemplar, pero si destacare lo que más me fascino de esta primera edición.

Ya desde la portada, hay una excelente congruencia, una ilustración de David Bowie como Ziggy Stardust realizado por el ilustrador norteamericano Alex Womersley, quien le dio en exclusiva este trabajo a la revista, la congruencia es obvia: el regreso musical del flaco de oro del rock y el regreso de este insecto tercamente roquero.

La tradicional clasificación mística de los discos revisados cambio a clasificación moscadónica, pero los textos del equipo de colaboradores de la revista en cada sección son iguales: sarcásticas, valemadristas, pero sin nunca perder la crítica imparcial, te guste o no.

Mis secciones favoritas definitivamente: Vacas sagradas y las investigaciones especiales moscosas. Ya verán porque, sobre todo con la primera mencionada.

Y YA PARA NO HACERLES LARGAS, MIS CONCLUSIONES

Sí, estoy satisfecho como lector de la revista, fue una buena bocanada de aire fresco el regreso de la Mosca ya urgía algo lejos de las complacencias y opiniones compradas de los voceros de siempre del periodismo roquero en México y el mundo, deseo de corazón que esto sea una etapa que dure mucho, mucho tiempo... de aquí a que nuestra invencible selección mexicana sea campiona indiscutible del mundo.

Como profesionista del diseño gráfico también estoy satisfecho a decir verdad, cada diseño de los contenidos es austero, por el uso mínimo de fuentes de ornamento, pero a la vez conserva esa jerarquización irregular de los elementos gráficos y de texto que tenía en su etapa anterior que la hace dinámica, leíble y legible, las ilustraciones como siempre son excelentes como la clasificación de fotografías y su acomodo.

Sobra decirlo pero, no solo lean la Mosca, disfrútenla.

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